Autoridades de Jalisco informaron de la detención del hombre que “corregía” a la menor con descargas eléctricas.
Autoridades de Jalisco informaron de la detención de Jonathan Rafael “N”, quien era encargado de un centro de rehabilitación en donde quemó y dio descargas eléctricas a una menor de 11 años.
De acuerdo con información presentada por la Fiscalía General de Jalisco, el hombre de 29 años era el encargado del centro de rehabilitación ubicado en la colonia Santa Isabel, en Tonalá, ahí fue donde la víctima recibió agresiones físicas que le causaron quemaduras en diversas partes de su cuerpo.
La niña de 11 años fue rociada con alcohol y recibió descargas eléctricas como medida disciplinaria, lo que le causó lesiones físicas.
Fue el Ministerio Público quien acusó al encargado del centro de rehabilitación de maltrato infantil y lesiones calificadas contra la menor, por lo que solicitó una orden de aprehensión.
Los hechos ocurrieron en julio del 2022, pero es hasta ahora que se logró la detención del hombre que fue puesto a disposición del Juez Segundo de Control Especializado en Materia Penal del Primer Distrito Judicial del Estado de Jalisco, quien definirá su situación legal.
Centros de rehabilitación operan en la clandestinidad
Según información publicada por la Universidad de Guadalajara, los maltratos físicos y psicológicos son algunas de las irregularidades que se han documentado al interior de los centros de rehabilitación que se encuentran en la Zona Metropolitana de Guadalajara.
La investigadora Lidia Janet Vásquez, recopiló testimonios de personas que estuvieron recluidos en los que aseguraron que eran sometidos a castigos físicos que podían durar meses.
En 2022, la Comisión Nacional contra las Adicciones (CONADIC) tenía registrados 30 centros de rehabilitación en Jalisco, pero tenían contabilizados más de 50, por lo que muchos de ellos están operando de forma clandestina.
Autoridades confirmaron que no se realizan las inspecciones necesarias porque no cuentan con el suficiente personal para realizarlas, lo que permite que muchos centros de este tipo comentan actos que violentan los derechos humanos de sus internos.
