Los resultados corresponden al ensayo clínico en fase 3 'Blaze-2', financiado por Lilly y promovido por el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID).
La concentración de anticuerpos en el caso de la variante británica no se reduce, mientras que en el caso de la variante surafricana es seis veces menor, aunque por encima de los niveles necesarios para ofrecer protección.